Al olvido

Hace tiempo que me cuesta hablar, como un miedo a no saber estar donde los demás me piden que esté. Miedo no sé bien a qué.
Cada día creo un poco más que la edad nos va haciendo callar. Ya no digo tonterías por decir. Me asusta lo que creen de mí.
Al olvido todo cuando he aprendido, si ha de hacerme tanto daño lo que guardo en el cajón, yo se lo regalo al olvido. Todos y cada momento que hasta hoy llevaba dentro. No los quiero junto a mí, se los regalo al olvido.
Creía que hacerse mayor otorgaba algo más de control. Por lo menos mi caso no es así. Hay cosas que aún no sé decir.
Me confunde la gente al pasar, pánico a encontrarme a alguien y tenerme que parar a saludar. No sé me ocurre qué decir.
Al olvido todo cuanto he aprendido, si ha de hacerme tanto daño lo que guardo en el cajón, yo se lo regalo al olvida. Todos y cada momento que hasta hoy llevaba dentro. No los quiero junto a mí, voy a acercarlos aquí. Mientras salgo a pasear algo se los llevará, y así quizás al volver pueda ser que ya no estén aquí.
Yo solo por el callejón escondiéndome de los demás, quizás nadie me vea correr.

Elefantes


Bueno, Elefantes no es de mis favoritos, pero no sé por qué les guardo un cariño especial, quizás por el primer concierto que vi de ellos en la sala Oasis (decididamente los conciertos allí son inolvidables). A ver cuándo cuelgan el último disco en internet (¿qué queréis? ¡no tengo un duro!)