Mis pensamientos...

Wednesday, March 30, 2011

Gran Rex

Hace no mucho escribí un post en el que contaba cómo había recuperado a dos de mis mejores amigos. Ayer recuperé a mi más preciado ídolo: Enrique Bunbury. Sé que es alguien odiado por mucha gente, de hecho he aprendido a lidiar con casi todos mis amigos o conocidos cuando se meten con él. Pero también es alguien tan amado... Me cuesta explicar completamente por qué lo adoro (siempre se me olvida algo), pero es así, lo adoro. Puedo tenerle mucho cariño a Maga, y de hecho es el grupo de mis amores, o puedo idolatrar a Matt Bellamy porque me parece brutal todo lo que hace, pero Enrique... es especial. Ayer fui directa a Fnac a comprarme el doble CD que estrenaba, un directo grabado a primeros de noviembre del año pasado en Buenos Aires, uno de los lugares repletos de fieles seguidores. Llegué a casa ansiosa por escucharlo, porque, a pesar de que Las Consecuencias no me llenó demasiado (me gustó más Hellville De Lux), había leído el tracklist y me llenaba mucho. La verdad es que he de reconocer que no esperaba encontrar lo que encontré. Sigo sin explicarme cómo puede ser tan bueno versionando sus propias canciones... además de, por supuesto, su voz, esa voz que tantas veces me ha puesto los vellos de punta...
Me encantó recuperar algunos temas de Pequeño. En cuanto gane mi primer sueldo va a ser el primer CD que compre (de una larga lista de pendientes por insolvencia). Increíble las versiones de Sólo si me perdonas y El anzuelo. Gracias de nuevo Enrique.

Monday, March 21, 2011

Microclima

Pasas miles de momentos con tu familia, tus amigos, tus compañeros de universidad... pero sólo con esa persona especial se crea algo igual de especial. Se crea un espacio, un mundo paralelo en el que sólo jugáis tú y él, en el que el resto no importa y donde te refugias del vendaval de afuera... en el que eres tan tú mismo que a veces te asustas, y en el que ves tanto a la otra persona tal como es que conocerla acaba convirtiéndose en un deleite que te estremece... Es muy puro. Es como si cada esencia saliese del cuerpo y se entremezclase con la otra en una atmósfera nueva con características totalmente específicas e igualmente indescriptibles. Es excepcional y maravilloso...