Mis pensamientos...

Saturday, July 08, 2006

Mi círculo de confianza

¿Alguien tiene claramente delimitado su círculo de confianza? Si es así por favor que deje aquí constancia de ello. Si hay algo que tengo claro sobre mí y que constituye uno de los principales defectos que me hace confiar un poco menos en mí misma, es no sabes discernir entre las personas que bordean continuamente la circunferencia que recoge al resto, a los afincados.
Tengo a mucha gente escrita con bolígrafo en mi lista, y no suelo disponer de correctores, aunque a veces he tenido que buscarlos, incluso fuera de mí. Pero quizás tras el último de la cola (alguien impersonal, porque no presentan un orden definido, aunque sí una cierta organización piramidal, por así llamarla) hay algunos nombres escritos a lápiz, por un "porsiacaso"...
Hay muchos borrones, nombres que escribí estando segura de poder en un futuro no lejano remarcar ya sin dudas. Hay nombres tachados con la misma definitiva tinta con la que los hice merecedores de un poquito de mi confianza. Hay nombres que incluso me incitarían a rasgar el papel dejando un hueco semejante al que dejaron hace quizás un tiempo en mi interior. Hay nombres que a pesar de todo todavía no he podido, o no me he atrevido, a tachar definitivamente, a veces no sé muy bien por qué, otras perfectamente.
Pero lo que sí hay es una pequeña lista de personas cuyo nombre escribiría en letras tan grandes y poderosas que no pudiera nunca nadie convertirlas en un borrón, o en un hueco. Y eso me tranquiliza, y sin embargo a veces me asusta, me hace más débil, vulnerable a las reacciones que la tinta puede sufrir con el paso del tiempo, o simplemente con un pequeño golpe de algo que no sé muy bien cómo definir, y que sin embargo podría causarme tanto daño...

Verano apático II

Por si fuera poco... No entiendo por qué a pesar de los años las cosas siguen siendo exáctamente iguales. No sé, nosotros cambiamos, lo lógico es que todo cambie con nosotros, o al menos parece lo más razonable. Pero en el pueblo siempre es lo mismo. Pase el tiempo que pase las cosas no avanzan, siguen completamente estáticas. En la ciudad las cosas se suceden a un ritmo incluso vertiginoso (en algunas situaciones), sin embargo, y aunque sólo a nivel personal y en ciertos aspectos bastante puntuales, el pueblo es como un espacio ajeno al tiempo y al envejecimiento de los sentimientos. Pueden pasar mil años, pero siempre están ahí, siempre aparecen con las mismas sensaciones, en las mismas direcciones y desde las mismas desembocaduras. Me resulta incluso ilógico, y en cualquier caso aburrido y pesado.
Lo peor, o quizás lo mejor, de todo es que siempre esperas darte cuenta de que se acabó, de que con los cambios que vas sufriendo (que no son pocos) todo cambia a tu alrededor, y nunca te acostumbras a caer de nuevo en lo mismo de siempre, aquello que te lleva ocurriendo casi... ¿toda tu vida? y que sin embargo no deja de sorprendente. Es irónico, y aún así inevitable.
De todos modos, y recurriendo siempre a un forzado optimismo... al menos me mantiene ocupada sirviendo como pasatiempo a todo mi círculo de confianza.

Wednesday, July 05, 2006

Verano apático

Hace ya unos cuantos días que no pasaba por aquí. La verdad es que tampoco ha habido mucho que contar, y aún menos tiempo. He terminado los exámenes, y tengo dos para septiembre, no era muy dificil haber evitado esto, pero en fin, no puedo pedir mucho más.
El caso es que ya estoy preparando los bártulos para el FIB. Aún me quedan 10 días para irme pero estoy tan emocionada que ¡me parece un suspiro! Finalmente me iré el sábado día 15 con mi hermana a Barcelona para preparar tranquilamente todo con ella, ultimar detalles y demás, y ya saldremos para Benicassim el lunes 17. Hasta el 26 no volveré a pisar tierras aragonesas, ¡y no veais la ilusión que me haceeee!
En la cuadrilla de momento todo va bien, creo que aún falta verano para que empiecen las movidas... Espero que no sean muchas, la verdad.
Y bueno, lo de siempre sigue como siempre. Tampoco intento cambiarlo ni hacer nada por espabilar. Aunque sé que la fórmula no es muy complicada, y creo esperar que no cambiara nada, me da miedo, es más, he dejado de barajar la posibilidad desechándola por improbable. Debería aprender de este tipo de cosas, lanzarme a la piscina a sabiendas de que está vacía sólo para sentir cómo me cosen los puntos en la cabeza. Supongo que de ese tipo de cicatrices también se aprende, más que de los reflejos en la piel de una tarde soleada.
En fin, lo dejaremos todo al paso del tiempo, como siempre, y siempre seguiremos dejándolo al tiempo... así hasta que pase algo que cambie esto, algo que no voy a dejar de esperar sin llegar sin embargo a desearlo tanto como para moverme de mi cómoda postura de aletargamiento.
Será lo que tenga que ser (y con eso me reafirmo).