Todos al infierno

Hace poco encontré un libro publicado en 1970. Se llama Los Errores Sexuales, y lo firma un tal Doctor Frederik Koning. Sobre él se dice que estaba considerado mundialmente como uno de los más importantes sexólogos del momento. Voy a colgar aquí simplemente algunos retales del prefacio. Ahí van:

Las desviaciones sexuales que vamos a tratar a continuación son: la homosexualidad, la autosexualidad, la ninfomanía, los ensueños y fantasías sexuales, el narcisismo y el travestismo.

Nos encontramos ante el problema de establecer delimitaciones entre los conceptos de normalidad y anormalidad. La causa de las anomalías sexuales debemos buscarla en la estructura psíquica de la formación del orgasmo. Resulta muy difícil extraer conclusiones acertadas respecto al comportamiento, y determinar por tanto dónde comienza la anormalidad.

Tampoco es posible precisar la influencia de esta posible anomalía sobre la estructura de la personalidad, y sobre el comportamiento social, dado que muchos de los que la padecen la ocultan.

Ocurre también que esas personas reconocen esta anomalía como tal. La mayoría no buscan por sí mismos la ayuda del médico, y uno de los efectos de esta negligencia se manifiesta, sobre todo en los hombres, en la impotencia sexual prematura.

La anomalía sexual muestra en su evolución ciertas características que a menudo influyen en el desarrollo psíquico sexual, con síntomas de infantilismo y retraso del crecimiento sexual físico.

Es muy importante que los padres sigan el desarrollo sexual de sus hijos, pues cuando antes se descubre una anomalía sexual, mayores son las posibilidades de detener una evolución hacia cierta anormalidad que puede tener sus raíces en una predisposición innata.

Vivimos en un mundo en donde las tendencias hedonistas, al reforzar cada vez más las influencias que favorecen el desarrollo de las anomalías sexuales, debilitan a la vez la influencia de las normas morales y alientan las inclinaciones oscuras que se hallan presentes en todo ser humano.

No es de extrañar que exista un claro paralelismo entre el aumento de neuróticos y el de desviados sexuales, puesto que las dos situaciones se originan siempre a partir de una inestabilidad emocional, de un endeble equilibrio psíquico que puede resultar fácilmente perturbado.

Me arden los dedos sólo al escribirlo. Increíble, no tengo palabras. Lo que está claro es que vamos a ir todos al infierno, y con mucho gusto oiga.