Mis pensamientos...

Thursday, June 30, 2005

Dilema moral

Tengo un dilema moral que siempre me acecha pero al que intento, para variar, no hacerle demasiado caso, y pasar página lo antes posible. La verdad es que no sé ni por dónde empezar a explicarlo… Me ha pasado por la cabeza con ciertas personas en ciertos momentos, en numerosas ocasiones, pero supongo que puedo extrapolarlo a mi relación con el resto de los que me rodean.
Tienes por un lado tus intereses, lo que necesitas, dejémoslo en lo que crees que tienes que recibir. Y por otro lado tienes lo que esta persona está dispuesta a darte, lo que puede darte por compromiso pero sin que salga de él, y lo que sí sale de él. El pensamiento que te viene a la mente es aceptar sólamente la primera y/o última premisa. Jamás aceptar o querer recibir algo por compromiso, más que por compromiso, con el único fin de tenerte contenta, aunque no sea eso lo que él quiere. Pero luego piensas, y sabes que tú también haces cosas por los demás que quizás no te gustan, o aceptas cosas para amoldarte a lo que exigen los demás. Sin embargo no quieres que ellos lo hagan por ti. Prefieres que se comporten contigo tal y como son, hagan lo que hagan y te dañen o no te dañen a ti. Si es lo que les sale hacer, lo harán en consecuencia de lo que significas tú para ellos, y eso te sirve para tener más o menos a punto siempre una especie de medida en cuanto a lo que sienten hacia ti, en el nivel que sea. La putada es que no tengo una especie de decodificador que me desmenuce los comportamientos y les aplique puntuaciones. No sé interpretarlos, así que esta “medida” no me sirve para absolutamente nada. Es más, probablemente me hace todavía más sensible o vulnerable a sus actuaciones para conmigo. Todavía ahora después de mucho tiempo aplicando esta “teoría” no sé si hago bien o esto sólo sirve para que la gente me pisotee. Creo que hago lo correcto, al menos lo que es correcto para mí, pero no sé si así avanzaré día a día o iré como los cangrejos hacia atrás. ¿Debería cambiar? Supongo que sí, siempre debo cambiar, en demasiados aspectos, pero sé que al menos en este momento no me apetece hacerlo.

Wednesday, June 29, 2005

Friends

No, no voy a hablar de mi serie favorita (aunque ya tengo argumento para otro post, ¡jiji!).
Ayer me pasó algo muy curioso. Vinieron Coral y Pez a casa a comer, y estuvimos en casa hasta que se hizo la hora de coger el autobús para el pueblo. Entre tanto habían venido Rocío y Luis y nos subimos los cinco charrando sobre los líos de la cuadrilla, la peña... en fin, lo de siempre. Llegué justa a coger el billete, y el conductor me lo cogió justo antes de cerrar la puerta. Cuando subí las escaleras y volví la cara para despedirme de éstos, los vi sonriendo, diciéndome adiós con la mano y echándome la bronca por no quedarme a tomar algo con ellos. En ese momento me invadió una sensación de bienestar, de felicidad, de tener la certeza de que no quieres cambiar nada de lo que tienes... fue increible, no sé si alguna vez me había pasado (quizás sí con Araceli en uno de nuestros muchos momentos). Me senté en el asiento y mientras desenrollaba el cable de los cascos del MP3 noté cómo se me hinchaban los ojos y tuve que retenerme para que no me cayera un lagrimón. Jamás había llorado de felicidad, pero ayer sé que estuve a punto, y me encantó sentirlo.
(Quizás ayudó que cuando estoy con la regla me vuelvo ultra sensible, para bien y para mal:P).

Saturday, June 18, 2005

As Ferreiro

Pues sí, sí que es un As este chico... El concierto de ayer fue pletórico. Tuvieron que salir incluso una segunda vez para cantar un par de canciones totalmente improvisadas porque no les dejábamos irse. De hecho yo me hubiera quedado toda la noche allí... A parte de tocar todo el nuevo disco, lo cual esperaba con verdaderas ansias (ya nada más comenzar sonó "Mátame", si es que es ese su título), tocaron muchas de las mejores canciones de Piratas. Por supuesto el "Promesas que no valen nada" hizo hasta que la gente saltara (cosa ya curiosa en un concierto tan tranquilo), pero a mí me emocionaron sobremanera "Inerte" y "Espacio Denso", dos de las canciones del grupo que más he escuchado esta última temporada. También citar "M", bonita donde las haya, y otra canción de cuyo título no me acuerdo, pero que dice algo así: "Reconozco que esperar es más fácil cuando sabes que te has ido lejos, sabes que no has perdido posibilidad, y empujas más los huesos...". Además tocaron un par que yo no había escuchado (pero que lograron ponerme igualmente los pelos de punta, entre otras cosas, por la frase "No cometas hoy el crímen si no vas a cumplir la condena"), y algunas versiones de canciones inglesas, todas súper buenas (lo cual no cesa de joderme, porque no dijeron ni un sólo título). "I can't take my eyes off you, I can't take my mind off you", o "I don't know what you do... Why don't you play the game?" fueron de lo poco que pude descifrar.
Bonito momento también cuando sonó Manolo García en boca de Iván (y de todos los allí presentes): "¿Dónde estabas entonces, cuando tanto te necesité? Nadie es mejor que nadie, pero tú creiste vencer. Si lloré ante tu puerta, de nada sirvió. Barras de bar: vertederos de amor; os enseñé mi trocito peor. Retales de mi vida, fotos a contraluz... Me siento hoy como un alcón tocado por las flechas de la incertidumble". Y muy graciosa la incursión de aquel tema: "Mil campanas suenan en mi corazón, qué difícil es pedir perdón. Ni tú ni nadie, nadie puede cambiarme".
No sé, es difícil explicar lo que experimenté ayer... Sólo sé que me voy a poner ahora mismo el disco, antes de que todas esas sensaciones se borren de mi memoria.

Tuesday, June 14, 2005

Tiempo libre

Últimamente tengo tanto tiempo libre que incluso me abruma. Ya no sé ni lo que hacer... Resulta curioso que agobie estar todo el día sin hacer nada.
El otro día pensé en algo para escribir, pero el caso es que no me acuerdo...
Ahora estoy pensando en lo cruel que resulta que nos comportemos peor con las personas con las que tenemos confianza que con las que no. Es algo que no entiendo, pero que supongo que todos llevamos de una manera u otra a la práctica. Y se supone que las personas a las que más queremos son las que tenemos que cuidar con más ahinco, para no perderlas. Y es precisamente esa seguridad que tenemos la que nos hace ser así, quizás más como somos. El hecho de saber que no vamos a perderlas por ser naturales, con nuestros defectos. Al final tal vez sea más sano, tal vez la única manera de conocernos del todo, y no sólamente la parte bonita, que es muy fácil de mostrar (en algunos casos). No sé, a lo mejor está bien que las cosas sean así, aunque siempre guardando ciertos márgenes en cierto modo impenetrables.
Seguiré pensando en aquello en lo que pensé para seguir pensando sobre las teclas del ordenador.

Sunday, June 12, 2005

Fanática excitación

Es curioso que prefiera las cosas a medias que la seguridad al 100%. El otro día iba conduciendo el Nissan Almera de las prácticas para el carnet y lo andaba pensando. Pensé que sería mucho mejor presentarme al exámen práctico sin estar segura al 100% de que lo llevo de puta madre y lo voy a aprobar seguro. Cuando me presenté al teórico era algo así. Quiero decir, que hacía tests en los que seguía teniendo 5 y 6 fallos, y sin embargo me presenté y aprobé. Tiene mucha más emoción tener la posibilidad de salir perdiendo, saber que el éxito no está asegurado, sino que depende de factores como la concentración, la atención o la picardía. Y pensé que si podía aplicar dicha teoría a eso, podía aplicarla a todo lo demás. Y quizás estaba en lo cierto y funciono de alguna manera así. Supongo que es más excitante. Tener todo asegurado, saber que las cosas van a salir de una manera u otra (omitiendo excepciones) me parece tan... aburrido... tan... ¡soso!
Simplemente era eso lo que quería resaltar, porque me sosprendió de alguna manera pensar en esto el otro día, y me apunté mentalmente el dejarlo patente aquí.

Ahora me estoy acordando de una conversación que tuve hace ya un tiempo con Gloria. Las dos opinábamos lo mismo, y es que el entusiasmo es algo tan fundamental... Aunque la gente no se dé cuenta. Ambas creemos que sin eso, sin la emoción por las cosas, sin el "fanatismo" incluso, no se puede vivir. Me parece algo fundamental a la hora de experimentar las cosas en su totalidad, de sentirlas en lo más hondo de ti. Veo a cierto tipo de gente que me rodea, viendo pasar las cosas, sin estrujarlas, sin zarandearlas, sin botar a su alrededor... simplemente observando desde un plano alejado. Eso no es vivir... eso es dejar que la vida pase ante tus propias narices, sin dignarte a alargar el brazo para coger y disfrutar las cosas que se te presentan, que, tal vez aunque no nos demos cuenta, son muchas y muy diversas. Quizás el materialismo tiene mucha culpa en esto... No lo sé realmente, a lo mejor simplemente es el carácter de cada uno. De todos modos y aunque a veces me sienta muy "freak", me encanta ser así en ese aspecto, porque sólo yo sé lo que disfruto sintiendo las cosas tan dentro, emocionándome tanto con ellas... simplemente, viviéndolas.

Saturday, June 04, 2005

Mi peña

Bueeeeeeeno, supongo que esto es una especie de despedida para mi peña.
La verdad es que no sé por dónde empezar... Joder, he pasado tantos momentos tan buenos en ella... que, sinceramente, y aunque parezca una gilipollez, se me hace difícil irme ahora de allí.
Es en estos momentos cuando aprecias las cosas. Qué razón tienen cuando dices que no sabes apreciar algo hasta que dejas de tenerlo... Jajaja, la verdad es que me siento ridícula escribiendo esto, pero realmente me duele dejarla, y lo digo en serio.
Cuando llegamos allí era como que no era nuestra, como si estuviéramos de invitados. Pero poco a poco, a base de añadir nuestros "toques" con la pintura o simplemente el ingenio, la hicimos más nuestra. Hasta que al final estábamos más en casa allí que en cualquier otro sitio.
La de borracheras que habré cogido allí con todos mis amigos... Las noches muertas de verano jugando al Trivial, las películas en el portátil de Guillermo, las apuestas tontas con Diego y Cristian, los lanzamientos de galletas a los ladrillos y las canciones para el móvil con Iñigo, los futbolines con Luis, los putiferios con Carlos, los momentos de "confesiones" con Araceli, Coral, Pez, Espe... las cenas cantándoles a las reinas de las fiestas, los ratos post orquesta bailando encima de las mesas, los desayunos en Año Nuevo con Laura, las merendolas solo para chicas con leche y galletas, los pedales mano a mano con Araceli a base de vodka, mis primeros porros de fabricación propia, los dardos en el cuarto oscuro, las mantas en el cuarto oscuro... los preparativos para los "girasoles", las ouijas guiadas por Pez, los bocadillos del bar de la Conchi, las vueltas alrededor de una botella, los chupitos de melocotón con Pez, los petas a medias con Araceli en el cuarto oscuro, las cenas con la gente de Zaragoza, la nevada que cubría hasta los tobillos afuera...
Creo que habla todo por sí sólo.